El antiguo Mercado de la Plaza Chica o Mercado de Santa Ana está considerado como uno de los mejores ejemplos de la arquitectura racionalista en Badajoz. En oposición a los mercados modernistas de hierro (como el Edificio Metálico) este proyecto racionalista pretendía ayudar a la modernización de la ciudad.
Para ello, el arquitecto Rodolfo Martínez diseñó un edificio con planta de cruz latina y dos alturas, por un lado esto permitía aprovechar al máximo el limitado espacio disponible.
Y por otro lado, los espacios para los comerciantes se encontraban expuestos al exterior, más higiénicos (soleados, ventilados, fáciles de limpiar) y controlables.
El mercado cesó su actividad en 2005 y estuvo abandonado durante varios años, hasta que fue sometido a una rehabilitación durante los años 2009-2011 para adaptarlo como biblioteca pública.
Datos recogidos de: http://www.monumentosdebadajoz.es/main.htm
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