Bienvenidos a la ciudad de Badajoz : CALLE VASCO NUÑEZ

Esta calle que también fue llamada de Alcaicería, Jerónimo de Orduña, Antonio Peinado o Peinados, Cabios, Patadas y el último tramo en mayo de 1931 se le dió el nombre de Rafael de Riego, y en marzo de 1937 de General Aranda. Actualmente ostenta el nombre de ese explorador, conquistador y gobernante nacido en Jerez de los Caballeros que no es otro que Vasco Núñez de Balboa. Se inicia en el paseo de San Francisco y finaliza el la avenida de Ramón y Cajal, en la que desemboca cerca la la Puerta de Palmas.

Sus nombres de Antonio Peinado o Peinados, Jerónimo de Orduña, y Cabios nominan sus tramos en el siglo XVI. De la misma época es el nombre de Alcaicería, término árabe aplicado a los ámbitos dedicados a mercado, bien expresivo de que la zona se distinguía en esa época por su actividad comercial. Algo más tardío es el popular de Patadas, de significación no bien establecida, en razón quizá por su alejamiento, aplicado al último tramo, aunque a veces también al primero. Junto con Peinados, y sobre todo Cabios, perduró hasta el siglo XIX en los tramos iniciales. En 1860 todos se unifican en Vasco Núñez, hasta la plaza de Portugal. En 1924 al último tramo, antes inesistente, se le aplicó el de Romero de Cepeda, cambiado por Riego en la República, y este por General Aranda tras la guerra de 1936, hasta que en 1984 se incorpora también a Vasco Núñez.

En su extremo final, se situaba el parque de Artillería de San Vicente, cuya fachada principal, hoy traseras del hotel Zurbarán, definía el último tramo. Es una calle estrecha, con ligera curvatura y pendiente, y una de las más extensas de la ciudad.

Comienza en el cruce con Felipe Checa y la atraviesan Menacho y Santo Domingo, después genera Dosma por la izquierda, y un poco más abajo se abre por el mismo lado la plaza de Portugal, en la que recibe a Abril por la derecha, y hasta el siglo XIX, terminaba aquí. La calle Espronceda alineada con la puerta del cuartel, surgió a partir de 1885 formando el último tramo.

Con el transcurso del tiempo la actividad comercial se concentró en los tramos iniciales, donde proliferaban establecimientos, principalmente de servicios, entre ellos cabe recordar, el de automóviles de Luis Fernández Chiralt, en el nº 6, la barbería de Jesús Turza, luego de Catalina Vadillo, en los nº 4 y 6, el hotel Palax, luego sería La Favorita, y más tarde la Clínica Salazar en los nº 1, 3 y 5, el almacén de ladrillos de Antonio Sáez, en el nº 7, donde también vivía el Dr. José Clavel Estévez que fue alcalde de la ciudad, la hojalatería de Gumersindo y Norberto Fernández, en el nº 16, las carpinterías de Antolín Albaca en el nº 18, y la de Antonio López en el nº 20, la marmolería Salazar, antes de Nieto, en el nº 27, la tienda de pieles de Matías Mediero, en el nº47, el almacén de azulejos Olgado, en el nº 52, y una casa de baños en el nº 48. También vivía en ella la que quizás sea la primera practicante de Badajoz, Juliana Borrallo.

Locales que no podían faltar son la tabernas y bares, entre ellos el Chipén, en el nº 2, La Guarrita, luego Galán, en los nº 9 y 11, Los Conos, en el nº 14, el de Nogales, en el nº 45, o el de El Nene, en el nº 57. Por esta calle discurrían también los raíles del tranvía de caballos entre San Juan, Puerta Palmas y la Estación.

Existieron y existen en ella una serie de lugares y establecimientos los cuales vamos a hacer mención aquí, tales como:

Hotel La Favorita de Francisco Santos, traspasado a Francisco Hermoset que modificó el nombre y le llamó Hotel Palax, y más tarde la clínica del Doctor Salazar, una fábrica de guitarras de Juan Freixes, un valneario o casa de baños, los laboratorios de análisis de D. Javier Blanco y el de D. Manuel Barriga, el colegio de niñas de Manuela Salvatierra, Casa el Nene, el Bar Galán, el Bar Chipen de Rafael Miranda con Juan Y Merino, el Bar Morán, y el de Los Conos, la Pastelería Lusitana, los Muebles García Campos, el almacén de azulejos de Domingo Olgado, la casa de la familia de Álvaro del Solar, posteriormente los Ultramarinos Jiménez, la Joyería Conveitia, la Perfumería Lisboa, la tienda de juguetes de Francisco Cancho, las Mantequerías León, el Herbolario, Perfumerias Mendoza después Perfumerias Marionnaud, y posterior Superdrona, Calzados Alonso y posteriormente Calzados El Barato, el Cupón Extremadura, la Juguetería de Francisco Cancho, el taller de Sagardoy, la zapatería de Rentero, la farmacia de Jaraquemada, las peluquerías de Tapia, y la de Pedro Escorial, una administración de loterías, el estanco de Alejandro, una churrería, la gestoria de Antonio Sierra, la tienda de ropa femenina Piquio, el taller de fabricación de toldos de Andrade, y tantos otros....